Pedro G. Paúl Bello Weblog

martes, abril 03, 2007

VERDAD Y VALOR

La vida suele confrontarnos con nuestra realidad profunda, esa que tememos porque normalmente nos muestra la verdad de nuestra razón de ser. En política, cuando tal ocurre, quien es puesto a prueba puede escapar al reto y tratar de distraer su atención y la de quienes esperan su palabra y, así, repiten trivialidades insustanciales que no dan cuenta de la verdad o, por el contrario, puede apelar a sus valores profundos para decir, simple y directamente, lo que su conciencia conoce como verdad.

La primera alternativa muestra la actitud de un político que no puede ser líder. La segunda es la de quien está dispuesto a correr todos los riesgos para sostener la verdad que conoce. Es este el verdadero líder y es esa la condición de posibilidad de todo liderazgo, diriamos hoy, “sostenible”, valga decir, capaz de convencer, lo que es mucho más importante que vencer.

No puedo dejar de expresar mi sentimiento de admiración y sincero reconocimiento hacia tantos venezolanos que, sin arredrarse por la realidad de juicios emprendidos por la tiranía contra quienes, como ellos han actúan, rechazan siempre la tentación de silenciar sus conciencias y proclaman a los cuatro vientos la verdad que saben imperativo decir.

Son ellos vivos ejemplos para los jóvenes de este país, a fin de que se animen a imitar el valor que muestran, porque no lo hacen para conquistar “espacios” o mantener “seguridades” con actitudes acomodaticias, sino para asumir su responsabilidad de dar un paso al frente en esta oscura hora que vive la República.